miércoles, 2 de febrero de 2011

EL CREPÚSCULO DE LOS DIOSES

Si hace unos días la entrada trataba sobre Edith Head, hoy hablamos sobre el vestuario que la diseñadora creó para una película imprescindible: El Crepúsculo de los Dioses (Sunset Boulevard, Billy Wilder, 1950).

Cine negro en estado puro. Un cadáver flotando en la piscina de una mansión que nos cuenta cómo ha llegado hasta allí. Una historia fascinante sobre Joe Gillis (William Holden), un joven guionista de Hollywood en horas bajas y Norma Desmond (Gloria Swanson), una antigua estrella del cine mudo que se resiste al paso del tiempo. El Hollywood de los recién comenzados años 50, los estudios, sus trabajadores, las estrellas, los escritores, sirven de fondo y ambientan la extraña relación que se establece entre los dos personajes principales. La breve sinopsis la dejamos aquí y nos vamos con la mansión, marco indiscutible de la acción de la película, y el vestuario de Gloria Swanson-Norma Desmond.

La mansión de Norma Desmond en Sunset Boulevard

 Suntuosidad y decadencia que recuerdan un pasado esplendoroso, hoy olvidado por (casi) todos.

El dormitorio de Norma: cortinas, sábanas, colchas y una cama en forma de barco.

Un sofá rodeado de imágenes de Norma cuando era joven y toda fulgurante estrella de cine.
Toda la mansión está plagada de retratos de la diva.

El vestuario de Norma Desmond
Estamos en 1950, y Norma es una antigua diva del cine mudo. Fue una super estrella, pero hace tiempo que no hace ninguna película.
El vestuario de Norma Desmond está diseñado por Edith Head, la jefa de vestuario de la Paramount, en estrecha colaboración con Billy Wilder y con Gloria Swanson. Para el personaje de Norma, su estilo no tenía que ser de los años veinte, de cuando ella era una gran estrella, sino que tenía contrastar con la decadencia de la mansión, que no había sido redecorada desde los días del cine mudo (el suelo del salón de baile lo había sugerido Rodolfo Valentino).
 Edith Head utilizó las líneas básicas de New Look que Dior había impuesto un par de años atrás, pero de forma exagerada. Sin embargo, el New Look exigía una acentuación de la cintura, y aunque Gloria Swanson estaba muy delgada, ya no tenía una cintura estrecha.



Head y Swanson, trabajaron juntas para construir el estilo de una actriz todavía bella, pero que era una estrella olvidada. Head trabajó en múltiples bocetos, y ella y Swanson consideraron y descartaron numerosos tejidos, zapatos, joyas, accesorios, en función de su efecto dramático y sus cualidades fotográficas. El resultado: un estilo que destila glamour y grandeza que recuerdan a tiempos pasados, revisitados para una época en la que el mundo está cambiando.




A pesar de vestir prendas contemporáneas, el estilo de Norma Desmond destila nostalgia y cuenta con detalles que recuerdan al Hollywood de la época muda. Prendas con reminiscencias al trabajo de Adrian y Banton. Prendas que acompañan a Gloria Swanson por los salones de baile y las habitaciones vacías de su seudo palazzo italiano, su jardín descuidado y lleno de maleza, y la piscina vacía y abandonada (que posteriormente será puesta en uso para disfrutarla con Joe).




El blanco y negro, enfatiza el aire nostálgico del personaje principal. El vestuario de Norma Desmond se compone de tejidos como el chiffon, terciopelo, brocados, tafetán, tul, crepé, estampados de leopardo, que se utilizan de forma discordante. Print de leopardo para estar en la piscina, terciopelo negro para un vestido de tarde, ribeteado de armiño blanco; una negligeé de tul negro... Pieles como el armiño, la chinchilla, decoran varios de los modelos que Norma luce, dándole un aire de vieja reina del glamour. Tejidos lujosos, pesados y vistosos para prendas que se usan a lo largo de todo el día. La riqueza de los tejidos le proporciona ese punto diferente y chocante que configuran su glamouroso estilo.

A modo de ejemplo, el print de leopardo, tan de moda esta temporada, es un estampado que se repite varias veces en distintos atuendos a lo largo de la película. En un pañuelo para la cabeza, en un conjunto 
para estar en la piscina, la tapicería de su Issota Fraschini... Los zapatos de plataforma y tacón que usa en la piscina... El leopard print y las plataformas ya se llevaban hace 60 años (y más).

Edith Head diseñaba vestuarios para las películas, y su innato sentido de la moda hizo que esas prendas, que no seguían ninguna tendencia, se convirtieran en prendas atemporales. Prendas que cumplían una función a la perfección: construir un personaje y participar en la creación de la película, pero que también se han convertido en prendas con carácter propio y en exponentes de elegancia y buen gusto.

Bss!!

Fotos: hechas por mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario :-)